lunes, 17 de junio de 2019

Nostalgia



Cuando tienes una vida tan dilatada como la mía, los días van pasando más rápidos de lo normal, y estos los vas viviendo de recuerdos, unos buenos y otros no tanto, pero todos forman parte de la historia de tu vida.

Mirando a mi alrededor, me siento una superviviente, porque son tantos los amigos, y conocidos que ya no están con nosotros, que doy gracias de haber sido elegida, para seguir en este mundo, que aun teniendo este cosas que no nos agradan, la vida sigue siendo bonita .
  
Todas las personas tenemos una época, un año e incluso un día que recordamos especialmente; hay muchos en la vida, los malos vamos tratando de aparcarlos, para poder disfrutar de los buenos, tanto los pasados como los presentes
   
Para toda mujer que tenga hijos, la llegada de estos es un acontecimiento  qué jamás se olvidará, pero aparte de esto, los recuerdos  que tengo de una época, fue el tiempo que viví en Jerez de la Frontera. Fueron unos años en los que mis hijos  iban creciendo, unos en el Instituto, otros en el colegio, y también alguno en la guardería, esto hacia que me encontrara más libre para dedicarme a hacer cosas que auque me daban trabajo, también me hacian sentir útil ya que el trabajo de dedicarse a la casa y el cuidado de los hijos en mi época no estaba valorado como se merece.

Allí estuve más de veinticinco años, disfrutando de esa maravillosa ciudad, de sus alegres navidades, su impresionante Semana Santa, y sobre todo esa bonita feria del Caballo que por motivo de vivir en las proximidades de ésta, disfruté junto a mi marido de sus preciosas casetas, de ese paseo de caballos, coches enjaezados tan elegantemente, y que con su espectacular iluminación, hace que esta feria sea la más bonita de España.

Pero como digo, al principio, todo pasa muy rápidamente,  y sin apenas darte cuenta, un día te encuentras sin  tu compañero de toda la vida, te miras al espejo y te ves fea, vieja, y con sobrepeso, lo único que tiene de positivo esta etapa, es que en cada una de las arrugas de tu cara, hay escondida una vivencia,  una historia y una experiencia que no puedes tener, cuando la piel está tersa y bonita